Hace poco más de año y medio comenzó esta increíble aventura de transformar un Banco tradicional en una Plataforma de Servicios Abiertos Financieros. Y aquel elefante que conocimos en el 2019, no solo pudo soltar las ataduras a la pequeña estaca que lo mantenía estático y correr a la velocidad de un galgo, sino también reinventarse una vez más al ritmo de la danza del cambio. En esta charla les hablaré acerca de Elsa, nuestra “mascota” elefanta, pero en realidad estaremos hablando del nuevo ADN que ella representa, lo que somos, nuestra diversidad, lo que hemos logrado como equipo, proyectos y tecnologías, lo que aún nos falta y hacia dónde queremos llegar.
Y este relato está teñido de muchas particularidades ya que, sin lugar a duda, este es un año muy movilizante para nuestro mundo, el país, las empresas dónde trabajamos, nuestras familias y por supuesto nosotros mismos. Mientras el año pasado, en este mismo foro, exponíamos acerca de la transformación de una industria y por consiguiente del Banco, hoy por hoy, a causa de la pandemia, estamos viviendo una transformación sobre la transformación misma, o lo que llamaría “un big bang de recreación”.
La frase de Woody Allen, “si quieres hacer reír a Dios, cuéntale tus planes” es por más elocuente. La pandemia nos demostró lo inútil que puede ser efectuar planes a muy largo plazo. La realidad supera largamente a la ficción y lo impensado puede ser parte cotidiano de nuestras vidas de un día para el otro. Por ello, se pone de relevancia la necesidad de generar dentro de la organización las herramientas para una rápida adaptación a los cambios de contexto. Es un “aprender a aprender”. Esto significa adquirir la habilidad a aprender a utilizar cualquier herramienta, por sobre el conocimiento de cómo se utiliza una herramienta específica.
En medio del proceso de metamorfosis cultural, organizativo y tecnológico que ya estaba viviendo el Banco, se sumó el impacto de la pandemia y ello nos obligó a aceptar los espacios “caórdicos” sin temor a la incertidumbre y a la falta de respuestas. El impacto fue de 360 grados que incluyó múltiples aspectos:
• Cómo nos relacionamos con nuestros Clientes y nuestros colaboradores
• La forma de hacer las cosas
• Los productos y servicios
• Proyectos
• Tecnologías
• La responsabilidad social empresaria
No hay bibliografía ni experiencia de la que hayamos podido nutrirnos para estos momentos. Hasta ahora. Esta charla se centrará en cómo se puede abordar esta situación y seguir evolucionando, sin perecer en el intento. Al fin y al cabo, el desarrollo sostenible no puede alcanzarse sin innovación y la innovación se realiza mejor en una cultura que abrace y promueva el aprendizaje y el cambio constante. Es un proceso de aprendizaje en medio de la acción, de una intensidad extraordinaria, cuyo esfuerzo y cuidado que requiere es al menos ilimitado.
Nada fracasa tan fácilmente como el propio éxito, por eso seguimos avanzando en esta evolución y en esa línea reservaré la última parte de la charla, para contar acerca de los desafíos que encontramos en los próximos meses y cómo nos estamos preparando para ello.